El hormigón impreso o también llamado pavimento impreso. Hoy en día está en auge gracias a las innovaciones de colores y texturas que han aparecido. Además, los nuevos aditivos que se le aplican permiten que sean más resistentes y duraderos.

El hormigón impreso contiene los mismos materiales que las otras clases de hormigón. La diferencia con los segundos es la textura, formas y colores especiales que se consiguen con el primero. Estas diferencias se consiguen a base de aditivos: unos para añadir color, otros para mejorar la trabajabilidad de la mezcla y permitir aplicar patrones con formas y texturas variadas.

Al final podemos imitar muchos tipos de materiales: mármol, ladrillo, madera, adoquinado y un sinfín de otros materiales.

Es utilizado principalmente en paisajes urbanos, paseos, calles, urbanizaciones, terrazas, jardines, etc. Gracias a sus diferentes gamas de colores y texturas podemos conseguir un acabado más bonito que con el hormigón tradicional.

Con el hormigón impreso o pavimento impreso conseguiremos las grandes prestaciones que ofrece el hormigón tradicional y además unos acabados realmente bonitos. Permite, por ejemplo, la posibilidad de insertar figuras o superficies una vez aplicado en el lugar elegido.

Por otra parte, con este tipo de hormigón podremos imitar los adoquines, simular baldosas, piedras o incluso la textura de la pizarra. Recomendamos instalarlo en aceras, lugares cercanos de piscina o cualquier tipo de superficie como rampas, jardines o terrazas.